lunes, 21 de octubre de 2013

Capitulo 1 de la tercera parte

Comienzan LAS CATACUMBAS DE LA ENFERMEDAD ¿Que es el virus EM? ¿Quien lo creó? ¿Quien está contagiado entre nuestros protagonistas? ¿Es Leonel el único traidor? ¿Que es el apellido Dex? Estas  y muchas respuestas en esta tercera parte del libro DIARIO DE UN MUERTO

Capítulo 1: Me cogieron

Siempre intenté borrar mis huella que nadie me siguiera y por unos días que me relajo…

Corría el año 2015, yo me encontraba en la casa de la playa de mi familia; con mis primos y mi hermana. Estábamos pasando unas vacaciones geniales, yo me había mantenido en contacto con Jorge Bermejo, Luis y Carlos, ya que fuimos los únicos que nos pudimos perdonar lo que nos habíamos dicho hace tres años, ellos como yo estábamos contagiados por el virus EM, un día desaparecieron poco a poco y yo estaba preocupado desde hace un mes, pero no lo dejaba a florar a mi familia. En cierto modo creo que ellos lo sabían ya que estaba muy atento de que ellos no se contagiasen. ¿Cómo nos contagiamos?

         Antes de que empezaran las vacaciones mandé un mensaje a mis amigos diciéndoles que teníamos que reunirnos todos para hablar de lo ocurrido y perdonarnos, pero solo nos presentamos Jorge Bermejo, Luis, Carlos, Leticia y yo. Allí les llevé a las catacumbas, el colegio había permanecido cerrado pero como yo estaba en el CNI  podía entrar donde quisiese.
         -Chicos mirad-dije dirigiéndonos a la habitación de Braulio León-Hace unos días entré aquí para investigar más sobre la enfermedad y mirad lo que encontré-eché a un lado la cama y abrí una puerta en el suelo- Mirad… las catacumbas siguen.
         Al abrir la compuerta del suelo se podía ver unas escaleras y al acabar esas escaleras había un pasillo blanco, parecía más moderno que estas catacumbas. Bajamos y nos encontramos en unos laboratorios de la EM, allí había un montón de muestras del virus EM.
         -Mirad-dijo Carlos en un ordenador-Estas probetas con la enfermedad es una nueva versión del virus.
         -¿Cómo?-dijo Luis.
         -Sí… mira Jorge-dijo Luis sabiendo que Jorge se estaba sacando el doctorado.
         -Por lo visto es una nueva enfermedad que se transmite por el aire… ¿Os acordáis lo que nos dijo el policía antes de morir?-dijo Jorge.
         -Dijo que si encontrábamos una muestra del virus se podría encontrar la cura-dijo Leticia.
         -Pues ya está lo cogemos y nos vamos-dije con miedo.
         -Julián, ¿Qué es esta puerta?-me dijo Carlos señalando una puerta al lado de la puerta del laboratorio.
         -No lo sé, no he entrado nunca aquí, bueno hasta ahora, lo único que les informé a los superiores y ellos me dijeron que a la vuelta del verano analizarían la trampilla-declaré.
         Entonces Luis cogió una probeta de la cepa del virus y subimos corriendo, entramos en la sala donde estaban los niños muertos, sin niños, estaba todo quemado, cerramos la puerta para que pensaran que no había entrado nadie, ni la policía ni la EM. Subimos las escaleras hacía la biblioteca y allí a Luis se le cayó la probeta al suelo.
         -¡Mierda!-dijo dando se un golpe en la cabeza.
         -¡Corred!-dije.
         Salimos de allí corriendo y cuando habíamos cruzado la puerta allí estaban… ¿Antonio, Pablo, Adrián Martínez y Alejandro?
         -Hola chicos-dijo Adrián.
         -¿Adrián?-dijo Luis.
         -¿Pablo?-dije.
         -¿Antonio?-dijo Jorge.
         -Si, en efecto-dijo Antonio-Fingimos nuestras muertes y los videos que visteis.
         -¡Sois unos traidores!-dijo Leticia.
         -Si, en efecto-dijo Pablo-Todo fue en 2008 un amigo vuestro llamado Eric.
         -¿Eric?-dijo Carlos-Diréis Leonel.
         -Muy pronto-dijo Pablo-Pronto lo conoceréis. Ahora… Adri dáselo, esto son capsulas de unas vitaminas que hemos creado capaz de ralentizar vuestra próxima muerte, en cada caja que os está dando Adrián hay para 5 meses y debéis tomarlas una cada día.
         -¿Por qué nos lo dais?-dijo Carlos.
         -Porque así os tendremos bien controlados-dijo Antonio-además así nos aseguramos de que estéis callados, ¡Ah, por cierto! No compartías los mismos platos que otra gente, no compartías fluidos salivales con otra gente y si podéis evitar estar más de 5 horas en una misma habitación con otra persona, sería mejor.
         -Un día os recogeremos y os meteremos en nuestro centro de tratamiento-dijo Alejandro. Alex se acercó a mi y me quitó mi guante que usaba para ocultar el símbolo de mi muerte-¿Porqué lo escondes? Muéstralo con orgullo, ya que tú eres el gran Dex-se puso a reír como un loco.
         -Calla-dijo Adrián Martínez que se veía molesto con lo que pasaba-Sabemos que os habéis contagiado debido a que la EM tiene muchas cámaras en el colegio.
         -Cállate imbécil- dijo Antonio- O volverás al agujero donde os metemos a los que nos desobedecéis, esta sería la tercera vez te recuerdo.
         Y se fueron dejándonos con la palabra en la boca. Decidimos estar en silencio y vivir normal tomándonos la medicina. La primera en desaparecer antes de vacaciones fue Leticia, luego perdí la pista de Luis, luego de Jorge y finalmente de Carlos.
         Y allí estaba yo con mi mascara de enfermería viendo la tele con mi familia, les había dicho que tenía gripe A y que tenía que llevarla las 24 horas del día para no contagiarlos. Estábamos viendo un programa de humor llamado “La que se avecina”, cuando de repente se rompieron los cristales y cayeron ante nosotros unas probetas. Cogí una probeta rota con la etiqueta puesta y en ella ponía: Virus EM 2.0, mi cara cambio y grité a mi familia que corrieran pero era demasiado tarde les habían cogido Antonio, Pablo y… ¡Mario! Yo corrí y corrí dejando unas lágrimas… mis primos y mi hermana estaban infectados y yo estaba huyendo. Llegue al vestíbulo y me di contra alguien… ¡Era José Manuel Carreño!
         -No puede ser-dije asustado.
         -Los muertos no hablan-me dijo sacando una pistola con tranquilizantes.
Entonces corrí abrí la puerta y me alcanzó un dardo. Pude llegar a tiempo a un coche con un símbolo de la EM en la puerta, me escondí entre los asientos y esperé. Estuve una hora dormido y el coche aun no se había movido cuando entro una persona… ¡Era Leonel! Entonces entró en el coche otro hombre pero me tapaba el asiento del copiloto por eso no supe quien era pero oí lo que hablaban
         -De Habsburgo-dijo Leonel-Llegas tarde.
         -Lo siento-dijo la persona del asiento del copiloto-Eric para que me querrías ver.
         -Mira toma es la lista de la sucesión de la EM, como observarás soy el siguiente de la lista pero yo no quiero ser el único jefe… seremos los dos ¿Vale?
         -¿Cómo?
         -Sí, yo gobernaré en los asuntos de la enfermedad y lo de las armas y tú controlaras a nuestros soldados ¿OK?
         -Vale pero para ello lo tengo que…
         -Sí, mira en esta hoja, esta la línea jerárquica si consigues tachar todos los nombres conseguirás lo imposible.
         -Vale.
         Entonces ese hombre se fue, pero se le cayó la hoja que le dio Leonel y me la guarde. El coche empezó a moverse y el viaje duró unas horas, en un momento se paró el coche y me encontraba en el colegio y la bombilla de mi cabeza se encendió <<Ya lo tengo-pensé-Tengo que ir a la compuerta que abrió Vanesa>> Salí corriendo y me dirigí a la iglesia.
         Llegué al sótano donde habían encerrado a mis amigos y allí estaba una piedra con el símbolo de la EM la toqué y se abrieron las puertas en la pared, era un pasillo de roca oscura y no se veía nada hasta llegar a una habitación blanca donde había dos puertas en los laterales. Al salir del pasillo oscuro la puerta se cerró, a mi mano derecha había una puerta la cual entré y era el laboratorio que visitamos mis amigos y yo, me dirigí a la de mi izquierda y era como un recinto inmenso y blanco, había un montón de gente como unos 20 y era un vestíbulo que conectaba con unas habitaciones y unas aulas. Me dirigí a ver si encontraba a mis amigos por algún casual, los 20 chicos tenía unas batas azules, me dirigí a las habitaciones y allí estaba un hombre de espaldas que no conseguí reconocer y a José dándole un sobre, los dos estaban con unas mascaras de gas.
         -No lo pierdas otra vez… ¡Tu!-me dijo José y el hombre huyó.
         Yo intenté correr pero de repente sentí un pinchazo en el culo y me caí de boca. Me desperté atado en los laboratorios y delante de mí estaba Pablo con una máscara de gas.
         -Bueno, bueno-dijo-Tus primos y tu hermana están aquí.
         -¿Qué es esto?-pregunté intentando abalanzarme sobre él pero no pude hacer nada estaba atado a unas silla.
         -Esto es un complejo donde os tenemos controlados a todos vosotros, aquí están hijos de ministros, hijos de presidentes y hasta chicos que nos habéis tocado los huevos desde el principio. Os tenemos aquí por chantaje y o por convicción. Te vamos a dejar vivir pero con una condición que te quedes aquí sino mataremos a tu familia. Toma.
         -¿Qué es?
         -Es la medicina, tómala y Antonio te llevará a tu habitación.
         -Un momento-dijo Antonio y me cogió el guante de mi mano derecha y tocó mi marca, me dolió-Que la muestre con orgullo.

         Entonces salió… ¡Moisés! sin mascara y me dio una ampolla. Antonio me levantó, el si llevaba mascara, y me llevó a la habitación 2112.

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